"Año del Centenario de Machu Picchu para el Mundo"

viernes, 4 de febrero de 2011

NO HAY JUSTICIA SOCIAL SIN EDUCACION

Bajo la nueva concepción de la educación como instrumento fundamental de cambio y de justicia social, el presidente de la República, Alan García Pérez, acaba de reivindicar a dos pueblos protagonistas de grandes transformaciones y vencedores de traumáticas adversidades como son la pobreza extrema y la violencia terrorista.

El Jefe del Estado promulgó sendas leyes que dan vida a las nuevas universidades de San Juan de Lurigancho, en Lima, y a la de la histórica provincia de Huanta, en Ayacucho.

El primero nació como un asentamiento humano que albergaba a barrios muy pobres y se fue extendiendo al impulso del coraje y la laboriosidad de sus habitantes hasta convertirse en distrito, y ahora, con más de un millón de habitantes, aspira a constituirse en provincia.

Huanta, tierra bravía cuyos pobladores desempeñaron un papel fundamental en la guerra de la independencia y que sufrió la peor etapa de la escalada terrorista que desangró a la patria, hoy emerge con renovadas fortalezas y se proyecta como región promisoria en el campo de la agroindustria.

En ese contexto, el presidente Alan García subrayó que la creación de ambos centros superiores de formación profesional se inscribe en la gran reforma educativa que impulsa su gobierno, a la que consideró “espolón y bandera fundamental del cambio histórico del Perú”.

En efecto, junto con las reformas de la salud y la descentralización, la educación constituye herramienta fundamental para que el Perú pueda consolidar su crecimiento económico y dar el gran salto hasta convertirse en un país del Primer Mundo, sin pobreza, con justicia social e igualdad de oportunidades para todos los peruanos.

Esa es la razón por la cual el Dignatario demanda la continuidad y el perfeccionamiento, en los años próximos, del nuevo modelo educativo basado en el esfuerzo, el mérito y la excelencia, desde los primeros grados de la educación básica hasta los niveles superiores, tanto para estudiantes como para docentes.

Es indispensable que todos los peruanos comprendamos que para impulsar el desarrollo y responder a nuevos desafíos de productividad y competitividad, es indispensable impulsar permanentemente las evaluaciones y capacitaciones a los maestros, y así aumentar las remuneraciones de los mejores y de quienes se hayan esforzado más por mejorar.

Crecer no solamente es producir más, sino, esencialmente, mejorar la calidad de nuestros productos, desarrollar la innovación tecnológica y la creatividad, tecnificarnos y capacitarnos cada día, y todo eso solamente se puede conseguir con una educación de calidad.

En la misma medida en que el Perú está despertando a gran velocidad al desarrollo y que el mundo reconoce nuestro avance y nos considera como “país piloto” en el continente, así también los peruanos tenemos que prepararnos para los desafíos que implica ascender a etapas superiores.

Archivo de Noticias